
El sol salió por tu piel
y de hogaza recién hecha eran tus manos,
reposteras de caricias horneadas
en roces del inconsciente.
Sorbí café de tus entrañas
(sacarina, por favor,
azúcar la de sus ojos)
sin tocar de tu boca
lo que no fueran susurros
de tus palabras risueñas.
Pero me hablaban de dulces,
y tragué mil calorías
en el borde de tu alma.
La eternidad de un parpadeo
me devolvió a la noche
que me encontró mendiga,
vacía de pan y astros,
sin ti.
y de hogaza recién hecha eran tus manos,
reposteras de caricias horneadas
en roces del inconsciente.
Sorbí café de tus entrañas
(sacarina, por favor,
azúcar la de sus ojos)
sin tocar de tu boca
lo que no fueran susurros
de tus palabras risueñas.
Pero me hablaban de dulces,
y tragué mil calorías
en el borde de tu alma.
La eternidad de un parpadeo
me devolvió a la noche
que me encontró mendiga,
vacía de pan y astros,
sin ti.
...
11 comentarios:
Muy buena.
De pasar al casi sobrepeso al vacío. Precioso poema.
Besos con azúcar glasé.
Tus espléndidos versos llenan mi silencio sobrecogido.
Mil calorías que tragar desde tan densos bordes.
Besos agradecidos.
Que suerte que cerrar los ojos nos de placeres cómo esos... menos mal que el sueño también forma parte de la vida! Quien dice que es realidad y que sueño?
Un saludo, me gustó!
En el amor sobra la sacarina, el temor al exceso de calorías y cualquier modalidad de límite...Hay que vivirlo con plenitud, aunque "engorde" (generalmente, adelgaza)
Espléndido poema, Rocío
Oye, Sire, ¿te has dado cuenta que cada verso tuyo es un titular en sí mismo?
Seguiré llenando con estos el baúl de los despistes. (Lo que pones entre paréntesis es de lo más bonito que he leído en tiempo)
Besos.
Jeje, Maritoñi, los extremos, sí. Gracias, reina. Glaseados también para ti.
Ybris, ¡ay!, espero que tu silencio sea tan necesario como pasajero. Es muy bueno a veces. Ojalá que estés bien. Un beso muy fuerte.
Tienes razón, Atis, es difícil separar lo soñado de lo vivido. Gracias por tu visita.
Me alegra verte aquí, Luis Antonio y estoy contigo, soy muy golosa :)
Qwerty, tú siempre me lees con ojos azucarados. Por eso te gusta. Y yo me alegro.
Besos (ésos no están en el baúl)
"La eternidad de un parpadeo" La de cosas que pueden ocurrir en él. La misma eternidad que mi admiración por tus escritos.
¡Enhorabuena!
Prefiero mil veces mil este desayuno con diamantes que el mío con cereales.
Es más, creo que me quedaría sin desayunar.
Hay noches en que las calorías se olvidan y sólo aparecen los fantasmas que habíamos escondido de la luz.
Magníficos versos.
Solo puedo aplaudir,
con muxas muxas calorias :)
asias por llenar almas con tan bellos versos.
bez
para que dure más, tomarlo de a pocos día a día y con mucha paciencia, disfrutando totalmente cada momento.
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